Los cursos intensivos de inglés son una modalidad de aprendizaje cada vez más demandada en las academias de idiomas. Estudiar inglés en uno o tres meses, de forma intensiva, no sólo ayuda a mejorar la gramática y el vocabulario sino, sobre todo, la fluidez en el idioma. Pero ¡ojo! También tendrás que trabajar y estudiar en casa para consolidar lo aprendido y sacar el mayor provecho a tu curso.
Es por ese motivo por lo que, habitualmente, es el verano la mejor época del año para realizar este tipo de cursos. Con un horario laboral en jornada continua o acabados los exámenes y con los días más largos, es más fácil concentrar los esfuerzos en aprender. El ritmo en estos cursos es rápido y se avanza mucho lo que, normalmente, conlleva un esfuerzo adicional individual en casa para seguir el programa, esto es, nos exigirá, necesariamente, marcarnos unas pautas de estudio y ser más autónomos a la hora de organizarnos.
Es importante también complementar el curso con otros recursos que, en otra época del año son más complicados de utilizar por la falta de tiempo: ver películas en versión original, escuchar música practicando con las letras de tus temas favoritos y leer libros, revistas y periódicos en inglés. El esfuerzo complementario te ayudará a asimilar lo aprendido y tendrá su recompensa con resultados más rápidos y afianzados.
Los contenidos que se desarrollan en estos cursos están mucho más personalizados y adecuados a los alumnos que los cursos que se realizan de manera más general y extendida en el tiempo debido a que se diseñan bajo la premisa de que los alumnos están concienciados en aprovecharlos al máximo. De ahí que los profesores al frente de estas propuestas formativas se centren en los aspectos más importantes del idioma dejando de lado los superfluos y cuidando el equilibrio en las materias de listening, reading, writing y speaking.
Por otra parte, si el alumno necesita vocabulario de negocios, se le enseña vocabulario de negocios, y no se pierde tiempo con los colores, las partes de la casa o las preposiciones incluidas. Si en cambio, es viajar lo que se tiene en mente, el estudiante saldrá del curso sabiendo reservar una habitación de hotel, despachar su equipaje en el aeropuerto u ordenar una comida en el restaurante.
En resumen, las ventajas de los cursos intensivos de idiomas pueden resumirse en:
- Aprendizaje rápido
- Resultados más rápidos
- Libertad en la organización del estudio
- Temario más focalizado y personalizado
Sin embargo recuerda que, para obtener todos estos beneficios, es necesario contar con un alto grado de motivación para estudiar en casa y hacer los 'deberes' recomendados por los profesores.
Desde Boston House ponemos a tu disposición cursos intensivos de idiomas durante los meses de Julio y Septiembre. Hemos diseñado cursos intensivos desde 4 hasta 10 horas a la semana de inglés, francés, alemán, portugués, italiano, español, ruso, chino, japonés y árabe para niños y adultos.
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